La movilidad urbana está evolucionando, a un ritmo más acelerado que en otras zonas más deslocalizadas, hacia un escenario de descarbonización y neutralidad climática. Para ello, los usuarios están apostando cada vez más por vehículos eléctricos como los de la gama e-AIXAM. A día de hoy, es una de las tecnologías de movilidad menos contaminantes y más sostenibles. Sin embargo, conducir un coche eléctrico en la ciudad tiene muchas más ventajas de las que, a priori, se nos vienen a la cabeza. ¿Quieres saber cuáles son y por qué deberías plantearte esta opción? ¡Te lo contamos!
Además de la ventaja evidente de la reducción de la contaminación, la conducción de coches eléctricos como los que conforman nuestra gama e-AIXAM ofrece numerosos beneficios. A continuación, resumimos los más importantes que, sin duda, te harán plantearte esta opción de movilidad:
Desde el pasado 1 de enero, todos los municipios de más de 50.000 habitantes están obligados a implementar, como mínimo, una Zona de Bajas Emisiones (ZBE). Se trata de un área en el que se restringe la circulación, acceso y aparcamiento a los vehículos más contaminantes. En cambio, los vehículos eléctricos gozan de la etiqueta CERO, un distintivo medioambiental con el que podrán circular libremente por los grandes núcleos urbanos. Se trata de una medida a la que cada vez se están acogiendo más ciudades españolas.
Una de las cualidades de las baterías de los coches eléctricos es que aprovechan lo que se conoce como frenada regenerativa para aumentar su autonomía. Es decir, cada vez que pisamos suavemente el pedal del freno, o que aprovechamos la propia inercia, se recarga la batería. Piensa que, en una gran ciudad, las retenciones del tráfico son relativamente habituales, y en estas situaciones es fácil aprovechar la inercia del movimiento.
La vida útil de las baterías es limitada, pero hay formas de optimizarla al máximo. Una de ellas es evitar dar acelerones o frenazos demasiado bruscos, algo que, en una gran ciudad, es relativamente sencillo. Además, si se compara con el gasto que se produce al utilizar un vehículo de combustión por cada 100 kilómetros, es muy inferior en el caso de los vehículos eléctricos.
Este tipo de coches, como los de la gama e-AIXAM, no emiten ningún tipo de gas contaminante. Y no solo eso, sino que también se reduce la contaminación acústica. Los vehículos eléctricos apenas se oyen, y eso se traduce en menor sensación de estrés y alerta constante.
A día de hoy, aunque los vehículos con etiquetas B y C pueden circular por las grandes ciudades, hay muchas en las que no pueden aparcar en la vía pública, sino que están obligados a ir a un parking. En cambio, los coches con etiquetas ECO y CERO, entre los que entran los eléctricos, pueden estacionar en cualquier calle. Asimismo, disfrutan de ventajas económicas y descuentos en las zonas de estacionamiento regulado, precisamente por su condición sostenible.
6) Ayudas económicas
Además de los descuentos mencionados anteriormente, la compra de un coche eléctrico cuenta con importantes incentivos fiscales. El más conocido es el Programa MOVES III, que subvenciona con hasta 7.000 euros la adquisición de un coche eléctrico. En este sentido, ten en cuenta que los coches de la gama e-AIXAM son más económicos que los vehículos eléctricos convencionales, porque son coches para los que no hace falta tener carnet de conducir B. Por tanto, apostar por un coche eléctrico sin carnet no solo es una alternativa más segura y sostenible, sino también más económica.
La gama eléctrica de coches sin carnet de la que disponemos en AIXAM cumple con todas las ventajas que hemos descrito y, además, suma más razones por las que es la mejor alternativa de conducción en grandes ciudades. En primer lugar, conducir un coche eléctrico sin carnet es más seguro que ir en bici en una gran ciudad. Además, la vida útil de los coches e-AIXAM es de las más amplias del mercado. Ten en cuenta que las baterías tienen una garantía de hasta 5 años, lo que ya se traduce en buena rentabilidad a largo plazo.
En cuanto a la conducción propia de las grandes ciudades, los coches eléctricos de AIXAM tienen un tamaño más reducido, lo que hace que sean mucho más fáciles de manejar y de aparcar en cualquier sitio. Además, su velocidad está limitada a 45 km/h, así que el consumo de energía se reduce al máximo. Y, cuando esta se agote, puedes recargarlos tanto en puntos de recarga públicos como en un enchufe doméstico, no requiere grandes instalaciones adicionales.
Y, por último, es una alternativa accesible para más personas, ya que solo requiere el carnet de conducir AM. Esto significa que tanto los jóvenes de 15 a 18 años como los adultos que no tengan el permiso de conducción B pueden llevar un coche eléctrico de AIXAM y ser independientes. Por no hablar de que son seguros, y fáciles de conducir. Por tanto, si quieres apostar por una movilidad sostenible, segura y económica, ¡AIXAM es tu mejor opción!